jueves, 4 de agosto de 2016

LA PALABRA CONVENCE, EL EJEMPLO ARRASTRA



No te preocupes porque tus hijos no te escuchan ellos te observan todo el día” Madre Teresa de Calcuta.


Muchos de nuestros comportamientos y actitudes son expuestas ante nuestros hijos y de ellas es que nuestros hijos van aprendiendo, incluso más que de nuestros propios discursos o sermones.

Los padres constituimos el principal referente de nuestros hijos en la vida, por lo tanto no podemos pretender que ellos vivan lo que no practicamos.

Los niños son como esponjas y las palabras tienen su fortaleza en el ejemplo del que habla, eso es ser congruentes y coherentes.


Como lo expresó Albert Einstein “Dar ejemplo no es la principal manera de influir, es la única manera”.

El Poliamor

  Porque para quererte no necesito tenerte, te quiero libre; conmigo o sin mí. Te ofrezco mis brazos para estar juntos, o te doy mis alas pa...