"A
veces, lo más productivo que puedes hacer es relajarte." Mark Black
Aunque,
en pequeñas dosis, el estrés puede ayudar a centrarnos y actuar con rapidez,
sin embargo, cuando este estado se vuelve constante, se convierte en un
problema crónico que debemos evitar a toda costa.
La
OMS reconoce el síndrome del burnout, “síndrome de estar quemado” o
de desgaste profesional, describiéndolo como un trastorno emocional fruto de
una situación de estrés crónico.
El
burnout es un estado generalizado de agotamiento provocado por un
alto nivel de estrés. Este malestar puede ser físico, mental o
emocional y estar muy relacionado con la actividad laboral que desempeñan
las personas.
Los síntomas de burnout
Si bien cada persona vive el estrés de diferente
manera, lo cierto es que existe un cuadro de síntomas específicos que
caracterizan el burnout. Estos son los más recurrentes:
1.Problemas
cognitivos: el estrés
prolongado puede afectar a la concentración, la memoria y la toma de
decisiones.
2.Disminución en la autoconfianza: producida por un
sentimiento de insuficiencia que se refuerza en tanto que las personas no
pueden cumplir con todos los pendientes.
3.Trabajar
con irritabilidad y enojo.
4.Dificultad para dormir: relacionada con
las preocupaciones constantes o con las afectaciones físicas y del ciclo de
sueño.
5.Dolores musculares: detonados por un
incremento en la tensión física o por dedicar mucho tiempo en una misma
actividad.
6.Cefalea o mareos: provocados por pasar horas continuas ante la
computadora o por forzar las capacidades mentales para resolver
problemas.
7.Problemas
gastrointestinales: vivir una
situación de estrés laboral puede alterar la función digestiva, causando
síntomas como dolor abdominal, diarrea, estreñimiento y acidez estomacal
8.Fatiga: derivada de la actividad física y mental extrema,
así como por agotar las energías en jornadas de trabajo extenuantes.
9.Depresión: propiciada cuando los anteriores síntomas afectan
el comportamiento de las personas, lo que genera una mala imagen propia,
falta de seguridad y desmotivación.
10.Nerviosismo constante: originado por la
falta de seguridad, incertidumbre y temor ante el fallo.
Cambios de comportamiento que pueden derivar en
emociones extremas, tales como conducta explosiva o impulsos irracionales:
ocasionados por una falta de control psicosocial,
aislamiento social.
Por lo general, estos indicios se presentan de
forma conjunta, pero algunas personas tienen aptitudes más
desarrolladas para lidiar con ciertos efectos del estrés, así que no
presentan todos los signos de burnout.
De cualquier modo, lo más importante es
saber identificar cuando alguien en tu equipo de trabajo está
atravesando por esta situación o, incluso, cuando tú mismo lo padeces. Solo de
este modo, podrás actuar para mejorar las condiciones de trabajo de las
personas.
Causas de burnout relacionadas con el trabajo
-
Sentir que tiene poco o ningún control sobre su trabajo.
-
Falta de reconocimiento o recompensa por el buen trabajo.
-
Expectativas laborales poco claras o demasiado exigentes.
-
Hacer un trabajo que sea monótono.
-
Trabajar en un ambiente caótico o de alta presión.
-
Causas del estilo de vida de burnout
-
Trabajar demasiado, sin tiempo suficiente para socializar o relajarse.
-
Falta de relaciones cercanas y de apoyo.
-
Asumir demasiadas responsabilidades, sin suficiente ayuda de otros.
-
No dormir lo suficiente.
-
Los rasgos de personalidad pueden contribuir al burnout
-
Tendencias perfeccionistas; nada es lo suficientemente bueno.
-
Visión pesimista de usted mismo y del mundo.
-
La necesidad de tener el control; renuencia a delegar a otros.
¿Cómo
enfrentar el síndrome burnout?
Hay
una gran variedad de herramientas y estrategias que puedes implementar para
tomar medidas contra el agotamiento en el trabajo.
Sé
proactivo: Planifica y gestiona adecuadamente el
contenido de tu trabajo para prevenir la sobrecarga laboral. Es mucho más fácil
prevenir el Síndrome de Burnout que solucionarlo una vez que ya se
produjo.
Conciliar
con límites claro: Es importante
establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal. Definir
tiempos de descanso, desconexión digital y actividades de ocio para equilibrar
las responsabilidades laborales.
Marca los límites: Todas las causas del burnout tienen algo en común: la presión externa. Una de las mejores maneras de revertirlo es importante establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal. Es importante definir tiempos de descanso, desconexión digital y actividades de ocio para equilibrar las responsabilidades laborales.
Cuídate: Con mucha frecuencia, el síndrome surge
porque dedicamos demasiado tiempo al trabajo y nada a nosotros mismos. Dedícate
tiempo, haz algo que te guste y fíjate si puedes dejar de pensar en el trabajo
durante una hora, una tarde o un fin de semana completo.
Practicar
técnicas de relajación: Realizar
actividades como meditación, mindfulness o yoga puede ayudar a
reducir los niveles de estrés y a sentirse más relajado.
Realiza
actividad física: El ejercicio ayuda a descargar la tensión. Se
recomienda hacer una caminata diaria de, al menos, 20 minutos.
Desarrolla
la resiliencia: Forja buenas
relaciones en el entorno laboral. Muchas veces, el burnout se produce
porque estás aislado y, a la vez, bajo mucha presión. Una buena opción para
fortalecer la resiliencia con el fin de prevenir el agotamiento es cultivar las
buenas relaciones en el trabajo. De este modo, si las presiones empiezan a
acumularse, tendrás el apoyo social de tus compañeros para que te ayuden.
Jerarquiza
tus objetivos: Esto no
significa que no vayas a tener mucho trabajo más adelante, sí implica tener una
idea clara a qué darle prioridad, qué es lo importante en tu trabajo en el aquí
y el ahora. Además, si la presión se acumula y necesitas deshacerte de algo de
trabajo, puedes priorizar las tareas más importantes con efectividad.
De
igual forma sugerimos ser conscientes de nuestras capacidades, saber delegar y
saber desconectar de los dispositivos tecnológicos cuando estamos compartiendo
con las personas que queremos.
Solicitar
ayuda: No hay que tener miedo de buscar ayuda
profesional a través de psicólogos especialistas en estrés laboral.
Todas
estas recomendaciones te ayudarán a disminuir el riesgo de padecer el Síndrome
Burnout, aunque es necesario comprender que la prevención es la mejor cura.
El
burnout es una señal innegable de que algo importante en su vida no está
funcionando. Tómese el tiempo para pensar en sus esperanzas, metas y sueños.
¿Está descuidando algo que es realmente importante? Esta puede ser una
oportunidad para redescubrir lo que realmente le hace feliz, reducir la
velocidad y darse tiempo para descansar, reflexionar y sanar.
"Casi
todas las cosas volverán a funcionar si las desenchufas por unos minutos...
incluso tú." Anne
Lamott.
Ps. Rocxana Croce