miércoles, 30 de mayo de 2018

Superando las adversidades, ser resilientes


Hay una fuerza motriz mas poderosa que el vapor, la electricidad, y la energía atómica: la voluntad. Albert Einstein
Ps. Rocxana Croce

Las adversidades, las situaciones traumáticas en la vida nos colocan en una situación límite donde se pone a prueba nuestra capacidad para sobreponernos y retomar las riendas de nuestras vidas.

Ello dependerá de la fuerza interior, de las ganas, la voluntad que pongamos para el logro de nuestros objetivos, deseos y anhelos.

Quedarnos en una posición de indefensión, inercia o de lastima solo impide que pongamos en marcha todas las habilidades que podemos desarrollar y que poseemos como poderosas fuerzas internas (a veces desconocidas por uno mismo),  pero que muchas veces preferimos no desplegarlas, ya sea porque nos sentimos mas cómodos quedandonos donde estamos o porque necesitamos que nos impulsen, nos motiven, nos dirigían para poder salir al frente y adaptarnos a una diferente situación.

Conquistarnos y desafiarnos a nosotros mismos implica una actitud diferente, un mayor conocimiento de nuestra personalidad,  de nuestro mundo interior, emprender ese viaje personal tan importante en cualquier circunstancia. Solo así podremos reconocernos, aceptarnos y superar las adversidades. 

Asumir las oportunidades que se nos presentan, tomar las riendas de nuestras vidas, finalmente ser valientes y aceptar los retos con fortaleza de cara a la vida, transformados, superados y con el compromiso personal de seguir la vida, con buen humor, recordando que no estamos solos y que todo lo que nos pasa tiene un por que en la vida.

martes, 1 de mayo de 2018

CUANDO 'NO ES NO'


"No pido a los hombres que alcen la voz a favor de los derechos de la mujer, estoy enfocada en que las mujeres sean independientes y luchen por sus derechos ellas mismas". Malala Yousafzai.
Ps. Rocxana Croce P.

Las altas cifras de feminicidios, violaciones y en general la violencia contra las mujeres, revelan un problema, una tara, que atañe no solo de las feminas sino también a toda la sociedad.

Y es que ésto viene de un aprendizaje generacional donde  las mujeres fueron enseñadas a ser sumisas, a agachar la cabeza, a bajar la voz, a no saber decir NO cuando no se desea ni se quiere.

Desde situaciones de violencia sexual, frases cargadas con altos contenidos obscenos, tocamientos, miradas fuertes, humillaciones, desprecios, etc. generan una personalidad con una baja autoestima, inseguridad personal y escasa confianza en si misma.

La cultura patriarcal,  donde se priva a las mujeres de sus derechos, que fomenta la desigual, apoyada en un machismo anclado fuertemente, tanto que los hombres sienten que las mujeres llegan a ser de su posesión, el objeto de sus deseos y que están destinadas a complacerlos en sus instintos y pasiones,  sin importar su universo de emociones y afectos, que simplemente por el hecho de ser mujer, deben ser complaciente y de fácil abordaje. Y si ella reclama, inmediatamente es coartada, silenciada, incluso destruida.

Lamentablemente no siempre las mujeres podemos felicitarnos por contar con nosotras mismas, nuestras propias defensas muchas veces son un flanco que es traspasado con suma facilidad, incluso sutilmente por algunos varones.

Pero se van dando muestras de una reacción femenina altamente esperanzadora, hay movimientos en masa, grupos de mujeres que empiezan a mostrar la cara con la frente en alto, porque el miedo va dando paso al  empoderamiento para denunciar, para enfrentar y para revelarse ante las desigualdades e injusticias, muchas veces a costa incluso de la propia vida.

Hace falta dotar de autoestima a las mujeres desde pequeñas, desde el hogar, cultivar la capacidad para decir NO con seguridad y autonomía.

Los padres de familia tienen la importante misión  de formar hijos en una cultura de igualdad y respeto, donde se aprenda a valorar a la mujer desde el hogar, a respetarla y amarla en todas sus dimensiones.

El Poliamor

  Porque para quererte no necesito tenerte, te quiero libre; conmigo o sin mí. Te ofrezco mis brazos para estar juntos, o te doy mis alas pa...