"Cambia tu atención y cambiarás tus emociones. Cambia tu emoción y tu atención cambiará de lugar" (Frederick Dodson)
Cuando
preguntamos a las personas qué emociones positivas han sentido en el día, por
lo general es frecuente que digan frases como “Hoy no ha pasado nada
especial. “No sabría decir ninguna ahora mismo…”.
La
gran mayoría de los días, son días rutinarios sin nada “extraordinario”; los
días con momentos bonitos, agradables pasan desapercibidos por no prestarles
atención. No esperemos a que ocurran grandes cosas para sentirnos bien.
La
clave está en cambiar el foco y mirar con una especie de lupa las
“pequeñas grandes cosas” que nos ocurren, poniéndoles nombre a esas emociones
que sentimos. Incluso encerrados en casa o en circunstancias adversas podemos
sentir más emociones agradables de las que podamos creer.
Te proponemos un ejercicio sencillo:
Registra cada día dos emociones positivas que hayas sentido y qué crees que la ha provocado
Día |
¿Qué
emoción agradable? |
Qué la
ha provocado |
X Junio |
Alegría |
Mi papá me dio un fuerte abrazo |
Sorpresa |
Me ha escrito un mensaje una amiga del colegio |
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